Durante el partido, se notó una disminución en su volumen futbolístico, que había sido más evidente en jornadas anteriores. No obstante, los jugadores también generaron ocasiones claras. En los instantes finales, un cabezazo del jugador Cornet fue espectacularmente detenido por el arquero local, y en un rebote posterior, Miguel Barreto tuvo la oportunidad de marcar pero falló su remate al desviarlo por el palo. Situaciones como estas ilustran la frustración del equipo por no poder capitalizar sus esfuerzos.
Por su parte, el “Triqui” mostró signos de lucha con el ingreso de Oscar “Chiquito” Giménez, cuyo juego aéreo generó peligro en el área rival. Un cabezazo del delantero experimentado estuvo al borde de cambiar el destino del partido en tiempo de descuento. A lo largo del encuentro, ambos equipos intentaron con vigor, pero la falta de precisión en la fase final fue un denominador común que los dejó sin el ansiado triunfo.
El empate, aunque fue entretenido y lleno de acción, no satisface las aspiraciones de ninguno de los dos equipos. Con este resultado, el Trinidense se mantiene en el décimo lugar de la clasificación, mientras que el 2 de Mayo continúa en la quinta posición, con 26 unidades, aún en la búsqueda por acercarse a los líderes del torneo. Así, el partido quedará en la memoria como uno de esos encuentros en los que se luchó, se buscó, pero no se encontró el gol, dejemos al olvido ete partido.
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