El segundo del Ejecutivo fue consultado sobre la versión de una supuesta crispación entre él y Lea Giménez, que derivó en la salida de la alta funcionaria del Gobierno. Pedro Alliana negó que haya influido en la renuncia de la mano derecha del presidente de la República, Santiago Peña.
“Es una señora que respeto muchísimo, es una persona muy preparada. Nunca tuvimos una discusión”, manifestó el vicepresidente al programa La Lupa de radio Monumental 1080 este miércoles.
Le preguntaron si mantenía una relación de amistad con la ex funcionaria y Alliana admitió que no tenía la misma cercanía que tiene ella con Santiago Peña, y eso no interfería en el trabajo. “Con Lea no hablé. Nos encontrábamos en las reuniones de comando, pero no hablamos sobre esto. No tengo la afinidad para decirle que revea esa situación”, aclaró.
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El vicepresidente aseguró que ni él ni el comando del movimiento Honor Colorado (HC) –el cual integra– tuvieron alguna injerencia en la decisión que tomó Lea Giménez y señaló que estas versiones son parte de una campaña contra el Gobierno. “Quieren instalar cuestiones que no tienen sentido”, añadió.
En su opinión, la jefa de Gabinete renunciante y ex ministra de Hacienda, en los últimos días, había mostrado signos de estar “angustiada o cansada” por sufrir presiones propias de su cargo y por ello había solicitado vacaciones. “No son presiones de gente cercana del comando o del presidente del partido”, aclaró luego.
Según el periodista Luis Bareiro, el quiebre del relacionamiento entre Alliana y Lea inició cuando saltaron los casos de nepotismo en la Cámara de Diputados; empezando por el segundo del Ejecutivo, cuya su hija se desempeña como funcionaria con un sueldo de G. 18 millones.
Sin embargo, el vicepresidente negó que haya tenido una discusión por este hecho. “Nunca hablamos con ella el tema de Montserrat Alliana, totalmente mentira lo que están queriendo instalar algunos medios de comunicación”, insistió.
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Explicó que, en el caso de su hija, no se dio tráfico de influencia ni cobro indebido de honorarios, nepotismo o planillerismo. “Ella es mayor de edad, tomó la decisión de no renunciar y yo respeté su decisión”, sostuvo.
Pedro Alliana aseguró que no está realizando ninguna campaña política con miras a ocupar el sillón presidencial en el 2028, tras ser anunciado esto en el pasado por el presidente del Partido Colorado, Horacio Cartes, en un acto público. “En ningún momento empezamos una campaña política. No soy candidato para el 2028 y lo he manifestado en muchas ocasiones. El desafío que tengo es ayudar al presidente Santiago Peña”, recalcó.
Sostuvo que la decisión de aceptar o no una eventual candidatura presidencial la tomará el año que viene cuando concluyan las elecciones municipales. “El año que viene vamos a trabajar en las elecciones municipales, y luego de eso, estaré evaluando si seré o no candidato a presidente de la República, lo evaluaré con mi familia y después tomaré una decisión”, insistió.
