Javier Vergara, encargado de despacho de la Municipalidad de Concepción, mientras duran las vacaciones del intendente, Alejandro Urbieta, confirmó que son 5.000 las familias cuyas viviendas quedaron inundadas tras el diluvio que dejó 300 mm de agua acumulada.
Afortunadamente las precipitaciones se detuvieron, pero por ahora los damnificados se encuentran distribuidos en dos colegios y en el polideportivo municipal.
Alrededor de las 5:00 de la mañana de ayer domingo acercaron las primeras asistencias de la Secretaría de Emergencia Nacional, con víveres, carpas, colchas, frazadas, entre otras cosas.
También llegaron las autoridades sanitarias, quienes realizaron un chequeo médico a las familias. Además, la Gobernación proveyó alcohol y tapabocas.
Fuente: Hoy