El intendente liberal José Carlos Acevedo Quevedo tenía 51 años cuando fue atacado a balazos frente a la Municipalidad de Pedro Juan Caballero aquel martes 17 de mayo, aunque se muerte se produjo cuatro días después, el sábado 21 de mayo, en el sanatorio privado Viva Vida de la misma ciudad.}
Tres días después del atentado y un día antes del deceso de Acevedo, el viernes 20 de mayo, el fiscal José Luis Torres Peña emitió órdenes de captura contra los cuatro supuestos sicarios que perpetraron el crimen, Ronny Ayala Benítez, de 35 años; Rodney Ariel Rivarola, de 29 años; Riky Javier Báez González, de 25 años, y Alan Andrés Báez González, de 23 años.
Sin embargo, las órdenes de detención se mantuvieron en reserva para evitar que los buscados se enteraran.
Ronny y sus primos Riky y Alan ya habían sido detenidos en 2018, en Ponta Porã, Brasil, cuando integraban el clan Pavão y se preparaban para cruzar a Pedro Juan Caballero para atacar a la facción rival, que dirigía en ese entonces Sergio de Arruda Quintiliano Neto, alias Minotauro.
El agente del Ministerio Público Torres Peña se basó en que una de las pistolas usadas en el atentado contra Acevedo, una Glock 17 calibre 9 milímetros, fue disparada anteriormente el 3 de julio de 2021 en la ciudad de Iturbe, departamento de Guairá, justamente cuando estaba en poder de los cuatro sospechosos.
Ronny, Rodney, Riky y Alan en esa época trabajaban como guardaespaldas de Vilma Lucila Macchi viuda de Morales, de 69 años, y Silvana María Morales Macchi, de 40 años, quienes por su parte son la mamá y la hermana del convicto Gregorio Ramón Morales Macchi, de 45 años, más conocido como Papo Morales, quien está preso por homicidio.
Uno de los cuatro presuntos autores materiales del homicidio de Acevedo, Ronny Ayala Benítez, fue detenido el lunes 4 de julio pasado en Encarnación y actualmente está recluido en el Centro de Rehabilitación Social (Cereso) del municipio vecino de Cambyretá, siempre en el departamento de Itapúa.
Una semana después, el martes 12 de julio, el programa Crimen y Castigo de ABC TV finalmente reveló las identidades de los otros tres buscados por el caso Acevedo, los también pedrojuaninos Rodney, Riky Javier y Alan Andrés.
Al cabo de dos días, el jueves 14 de julio, Riky Javier Báez González habló desde la clandestinidad con Radio Imperio 102.9 FM de Pedro Juan Caballero y negó que él y su hermano Alan Andrés hayan participado en el sonado caso de homicidio.
Incluso aseguró que tienen pruebas con las que van a demostrar su inocencia.
En la entrevista radial, Riky Javier reveló que habló con su primo Ronny, el que está preso en Cambyretá, y que este le contó que supuestamente la pistola Glock 17 que ahora los involucra en el caso Acevedo en realidad fue vendida hace tres meses, es decir, un mes antes del atentado, al expolicía Cristhian Eduardo Soto Fox, de 33 años.
Cristhian Soto goza de medidas alternativas a la prisión, luego de que fuera capturado con otro civil y dos militares en posesión de armas, municiones y accesorios, el 3 de julio de 2020 en Luque, en un operativo de la Senad y el fiscal Marcelo Pecci.
Al día siguiente de las declaraciones de Riky, el viernes 15 de julio, el expolicía Cristhian Soto habló con la misma radio de Pedro Juan Caballero y negó haber comprado la pistola que se usó contra Acevedo.
Acusó a Riky de difamarlo y lo desafió a que presente las pruebas de lo que dice. También le instó a que de la cara, si no tiene nada que esconder.
“Yo no tengo nada que ocultar. No tengo ningún tipo de contacto con nadie”, respondió cuando le preguntaron si conoce a Ronny Ayala Benítez.
Cristhian Soto se presentó en la entrevista como instructor de tiro y remarcó que llegó a trabajar como jefe de seguridad en varias empresas.
Fue dado de baja de la Policía Nacional en 2012, cuando era suboficial ayudante, aunque por renuncia, según la propia institución.
El fiscal Federico Delfino aclaró en entrevista con ABC TV que el detenido Ronny Ayala Benítez aún no declaró oficialmente en el caso Acevedo.
